En guerra contra el ruido: Sullana

Vecinos se han quejado ante la municipalidad y la Fiscalía, pero el proceso parece estar estancado.

 

Por Nelson Peñaherrera Castillo

 

SULLANA, Piura – La ciudad  parece sufrir nictofobia, el terror patológico a permanecer en silencio; es una de las pocas ciudades de Piura donde hay vecinos que han decidido combatir el ruido. Un centenar de ellos ha abierto un grupo en Facebook para coordinar acciones legales con la finalidad debajarle el volumen a la urbe.

En el Barrio Sur, Martín Herrera Reto es una especie de coordinador y administrador. Vive en la calle Hipólito Unanue, que nace en el portón de la Dirección Sub-Regional de Salud Luciano Castillo Colonna y corre en paralelo al río Chira. Desde su patio trasero tiene vista al valle: “La música se escucha como si estuviera aquí nomás y a veces se prolonga toda la madrugada”.

Cerca de su casa, entre las calles Arica y Paita y junto a la escalera que baja al Malecón Huamán de los Heros, un gimnasio aparentemente informal funciona a todo volumen: “Comienza a las 7 y 30 de la mañana, a eso de las 10 lo interrumpe, y arranca a eso de las 4  hasta las 7 de la tarde”, relata.

La vecina de enfrente ha pedido al propietario que reduzca la potencia, pero el sujeto le dijo de muy mala manera que no bajaba nada porque ésa es su casa.

 

¿en qué le molesta el ruido?

El colectivo de vecinos ya ha presentado quejas ante la Oficina de Fiscalización de la Municipalidad Provincial de Sullana (MPS) y denuncias penales ante el Ministerio Público (MP). Hasta donde se conoce, no hubo mucho progreso, y se vienen más problemas.

“Los de mi cuadra tememos  que ya se acondicionó un local para cebichería, y ya sabemos  que eso termina en karaoke, restobar o discoteca”, reclama Martín Herrera. “Ya alerté a la municipalidad y recién los han notificado”. El local parece no tener aislamiento acústico y la pared que da al valle está abierta.

“Son un disparate, un insulto, imagina que la municipalidad me diga en su respuesta: ¿En qué le molesta al recurrente?”, afirma Herrera, añadiendo que tampoco se ha resuelto lo de los vendedores con megáfono, y que siempre se le pide ser más explícito en su queja.

Asegura que se le han esgrimido argumentos como que no se puede atentar contra la inversión privada, aunque en la práctica se habría cambiado la zonificación de algunas áreas residenciales a corredores comerciales y así justificar negocios como una discoteca a una cuadra  del Óvalo Turicarami, en el sector oeste de Sullana.

 

Combate legal

en la esquina de la avenida José de Lama y la calle El Carmen, Urbanización Santa Rosa, funciona Terrazas. Según Lucy Guevara, quien vive enfrente, el local tiene licencia de restaurante y pub, pero por las noches y madrugadas la atención se extiende como discoteca al punto que el 25 de diciembre de 2021 se habría intervenido a una chica de 17 años en estado de ebriedad.

La señora Guevara es diabética, tiene una hija en tratamiento oncológico. “el azúcar no me baja porque estoy en constante tensión”, protesta; pero aún así ha acudido frecuentemente a la MPS y el mP para presentar quejas y denuncias en las que se terminó involucrando a funcionarios ediles, uno presuntamente ligado a Terrazas, como lo descubrieron dos medios de comunicación de Piura.

Según ella, las diligencias de constatación habrían sido irregulares: “Aún así, en mi casa detectaron que el ruido alcanza 60 decibelios, pero en el vecino que vive al costado [de Terrazas], 72 decibelios”.

Un decibelio (dB) mide la relación entre el aire que mueve un sonido y cómo éste es percibido por el oído humano. La Organización Mundial de la Salud lo considera como ruido cuando supera los 65 dB durante el día y los 55 dB durante la noche. Además, dice que la máxima exposición al tráfico vehicular no debe exceder los 53 dB durante el día y los 47 dB durante la noche.

Consultamos a la MPS sobre el estado de estas quejas; se nos dijo que se correría parte al Área de Fiscalización. Al cierre de este informe, no hemos recibido respuesta. Mientras tanto, los vecinos siguen coordinando mediante Facebook nuevas acciones legales y, dicen, no se van a rendir.

 

Esta versión: © 2022 Asociación Civil Factor Tierra. Todos los derechos reservados. Comenta en la caja debajo o en nuestras cuentas de Facebook y Twitter. ¿Deseas ayudar a estas personas? Escríbenos a factortierra@gmail.com